A las nueve de la mañana, hemos quedado para desayunar, aunque la mayoría se ha levantado temprano para pasear y hacer las últimas fotografías del amanecer.




A las nueve de la mañana, hemos quedado para desayunar, aunque la mayoría se ha levantado temprano para pasear y hacer las últimas fotografías del amanecer.
Ayer por la noche, después de la cena tocó preparar de nuevo la mochila pues hoy por la mañana dejaremos definitivamente el Orango Parque Hotel que ha sido nuestro hogar durante estos días y donde nos han tratado magníficamente.
Como de costumbre la primera labor del día es el desayuno del que damos buena cuenta a la vez que disfrutamos de un entorno tranquilo y bonito.
Llevamos en las Bijagos solamente tres días y cada jornada es diferente de la anterior aunque las sorpresas continúan. Para el día de hoy, esta previsto que hagamos una excursión para visitar las tabancas de Ambuduco, Aminda y Etiogo. Después del desayuno, bajamos a la playa y cogemos las barcas para adentrarnos por los canales de los manglares hasta llegar a tierra firme. Nada mas desembarcar, vemos unas huellas de un hipo que ha pasado por la zona y caminamos por un sendero repleto de vegetación y de grandes termiteros. Al momento y cuando estamos pasando por una casa al lado del camino escuchamos unas voces ¿qué pasa ¿nos preguntamos y rápidamente salimos de dudas, pues el hipo cuyas huellas vimos anteriormente ha penetrado en la tierra de
Maria Preta ( que así se llama la propietaria), ha destrozado todo el cultivo de mancarra y está un poco molesta; Antonio el director del parque que nos acompaña y Luis, toman buena nota del problema para intentar solucionarlo mediante la colocación de un pastor eléctrico; continuamos la marcha entre ceibas gigantes , procurando no pararse demasiado, pues hay unas hormigas que pegan unos bocados de miedo; ahora el objetivo es intentar observar en una ceiba un nido de una especie de loro que es endémico de estas islas; caminamos con sumo cuidado para no hacer ruido y Luis monta el telescopio para intentar verlo, pero después de permanecer un buen rato de espera el nido parece que esta vacío pues los loros han salido a buscar comida ¿qué pena?; continuamos la marcha disfrutando de este entramado de grandes árboles hasta llegar a la primera de las aldeas que vamos a visitar “Ambuduco”; Camiño va a buscar al mayor de la aldea que nos da la bienvenida; está ciego y vive en una casita al lado del poblado antiguo; recorremos el nuevo poblado haciendo fotos disfrutando con la gente que se muestra sumamente amable con nuestra presencia; en este poblado, están construyendo una nueva escuela,
pero mientras tanto los bancos están instalados a la sombra de un árbol y el maestro da las clases aquí; al vernos todos los chavales se sientan en sus pupitres , Alfredo pinta en la pizarra un hipo y el profesor les explica que este animal es sagrado y que no se les puede hacer daño ; pasamos unos momentos inolvidables haciendo fotografías y riéndonos con ellos. Seguimos la marcha por la tabanca entreteniéndonos más de la cuenta, haciendo más fotos y observando todo lo que nos rodea;
dejamos esta aldea y entramos en Aminda en donde Camiño nos presenta a una de sus hermanas que vive aquí y hacemos una parada rápida para comer un bocadillo; a partir de aquí el ritmo de marcha se incrementa pues tenemos que llegar lo antes posible a Etioga para coger las barcas, pues como baje demasiado la marea nos tocará empujar como así sucederá. Por el camino saludamos a todas las personas con las que nos cruzamos y finalizamos el recorrido en una playa en donde hay millones de conchas, ¿el motivo? , pues hay algunas familias que se dedican a coger
berberechos para después cocerlos y a continuación secarlos al sol; hacemos las fotos de rigor y todos a empujar pues la marea está demasiado baja y la barca roza en la arena; aquí Antonio tiene un pequeño percance pues al empujar ha pisado una raya y le ha clavado el aguijón. Ya en mar abierto, observamos a unos pescadores que de manera ilegal están tendiendo sus redes en un área prohibida, nos acercamos y Antonio les da el alto, les obliga a recoger sus aperos y son detenidos; Domingo pasa a su barca y son acompañados hasta la isla de Orango en donde requisarán su motor, el cuál no les será devuelto hasta que paguen una multa de unos 300.000 francos CFA (unos 500 euros). En la barca van 4 pescadores y dos niños. A mi me dan pena los niños, pero creo que esta es la manera que aprendan a respetar las normas de pesca dentro del área prohibida del parque de Orango. Llegamos justo a la hora de la comida y para no perder el hábito nos sentamos a la mesa y nos ponemos morados. Hoy está programada la tarde libre para descansar o poner el diario en orden, aunque al final Luis nos propone dar un corto paseo para observar aves (aceptamos encantados para bajar la comida) y acabar en la playa disfrutando de otra estupenda puesta de sol.
Pero mira por donde, y ya caminando por la arena de regreso al hotel, vemos a lo lejos algo que se mueve ¿qué será? , pues es una familia de monos verdes que han bajado de los árboles para alimentarse y corretear por la playa (aquí todo son sorpresas). Damos por finalizada la jornada de hoy y empezamos a prepararnos para la de mañana que también será otra de las más esperadas de este viaje, ya que nos desplazaremos a la isla sagrada de Poilao para ver el desove de la tortuga verde. Mañana másssssssssssss…..
Después de la comida ,Nuria nos dice que en la casita que se encuentra al lado de la playa en donde se encuentran los “iranes” (espíritus) ,van a celebrar una ceremonia en nuestro honor ;estas ceremonias siempre están dirigidas por los señores mayores de las tabancas y en ellas se pide la intervención de los espíritus; en esta ocasión la ceremonia estará dirigida por Augusto y el tío Oringa y el motivo de la misma será el desearnos buena suerte en nuestra visita a las islas. En Guinea Bissau, más de la mitad de la población es animista, es decir, creen en dioses llamados iranes, que adoptan diferentes formas los cuales son invocados mediante ceremonias rituales para diversos propósitos. En estas ceremonias se utilizan animales y aguardiente de cana. Antes de bajar a la casa de la playa nos avisan de que nos pongamos ropa sucia por lo que pueda pasar.
Cuando llegamos a la playa ya está todo preparado para que de comienzo el ritual. Nos sentamos en unos bancos; a un lado están el rey de Orango, el tío Oringa, Nuria , Ana y Xavier: enfrente el brujo de Eticoga, Didac, Lauren y Jose Luis; Alfredo, Gabriela y yo nos quedamos de pié para poder hacer fotografías. Al instante traen una jaula con dos gallos, el tío Oringa coge uno y se lo pasa al rey que comienza a invocar dando vueltas hacia una acacia que hay en el exterior del recinto y entrando en el altar ( está prohibido hacer fotos de este lugar) y saliendo para acto seguido agarrar el cuello del animal y de un tajo limpio cortarle la cabeza y soltarle por el recinto; la sangre sale a borbotones y mancha todo lo que se encuentra a su paso, a Nuria y Ana les toca la peor parte y así hasta que el gallo muere(ahora entiendo lo de llevar ropa sucia); a continuación beben un trago de cana y escupen hacia el altar. Mientras tanto el brujo ausculta las vísceras del animal para ver si son de color blanco y si así es, esto será la confirmación de que nuestro viaje será un éxito ( evidentemente las vísceras eran de un blanco inmaculado).
A continuación se repite la misma operación con el segundo gallo ,en esta ocasión la sangre le toca a Xavier y a todos nos ofrecen la posibilidad de participar en el ritual. Una vez terminada la ceremonia, los allí reunidos consumen la garrafa de cana hasta que se acaba. El resultado final es que a los viejos de la aldea les tiene que llevar Antonio en el remolque del quach pues están un poco perjudicados. Para los que no estamos acostumbrados a estos rituales han sido unos momentos de tensión pero no por ello ha dejado de ser uno de los actos más emocionantes del viaje.Continuará
A las nueve de la mañana ya estamos todos desayunando (aunque algunos han madrugado mucho más para disfrutar de la salida del sol) en una coqueta cabañita frente al mar. Como ya os comenté ayer hoy es uno de esos días en que uno esta expectante y ansioso de poder observar a esos grandes animales en su habitat natural; me estoy refiriendo a los hipopótamos que además cuentan con la particularidad (creo que es única en el mundo) que se han adaptado al agua de mar. Hoy nos acompañarán Antonio (director del parque), Junior (guarda),Luis y por supuesto nuestras biólogas de lujo en este viaje Nuria y Ana. Para desplazarnos hacia allí lo primero es coger las barcas e ir circunvalando la isla de Orango; en el trayecto vamos observando las aves que Luis identifica (a mi me gusta el buitre de las palmeras); comenzamos a adentrarnos por la desembocadura del Ancarroso, a medida que avanzamos por los manglares estos se van estrechando, y a veces hay que agachar la cabeza para que las ramas no nos golpeen, pero creo que
Es un momento de gran tensión, todos queremos estar en primera fila, las cámaras de fotos disparan sin cesar ; de repente Junior nos sugiere que retrocedamos pues parece ser que el macho dominante ha salido mas de la cuenta y amenaza con arrancar , al final solamente ha sido un conato ¿menos mal? pues si estos animales arrancan a correr ¡madre mía la que se lía y sálvese quien pueda! Hemos disfrutado del momento, pero hay que continuar la marcha, primero pasamos por el lugar en donde está situada la cámara del foto trampeo para ver si ha capturado algún ejemplar; Luis abre la caja y comprueba que hay una foto pero no ha salido la cabeza del hipo, da igual se trata de un proyecto y tiempo habrá, pero a pesar de todo se pone muy contento; aprovechamos para tomar un bocata a la sombra de una ceiba y seguimos ruta
hasta llegar a la laguna de Canicussa; el panorama que se presenta ante nuestra vista es espectacular, nenúfares, aves de todas las especies, cocodrilos, y en ocasiones también hipos. Está siendo un día de muchas impresiones y la guinda del pastel la pone la impresionante playa a la que desembocamos y en donde nos esperan las barcas para regresar a comer al Orango parque hotel. Continuarán las sorpresas en sucesivas entregas.
Por la mañana ya más descansados, desayunamos copiosamente y visitamos este proyecto en donde se está construyendo un orfanato para 20 niños y un huerto donde se está enseñando a las mujeres para que cultiven sus hortalizas; cargamos todos los bultos en las barcas y comienza nuestra singladura en dirección a las Bijagos. La salida desde el embarcadero de Biombo por los canales rodeados de manglares hasta llegar a mar abierto es impactante y ya se respira paz y tranquilidad; durante la travesía disfrutamos del paisaje (el día es estupendo y el mar está en calma) ya que navegamos entre islas, Herculano(nuestro timonel) se encarga de decirnos el nombre de cada una de ellas. Después de casi 4 horas de viaje nos aproximamos a la playa de la isla de Orango en donde nos están esperando para darnos la bienvenida los responsables del parque y todos los trabajadores del hotel. La verdad que ha sido emocionante ya que nunca me habían recibido de esta manera. Después de los saludos y presentaciones de rigor subimos directamente a la recepción y visitamos las instalaciones del hotel (al que dedicaré otro apartado) y directamente a comer. La comida es abundante y buena pero sobre todo tengo que destacar el estupendo pescado asado del que disfrutaremos a lo largo de nuestra estancia.
Por la tarde está previsto que nos desplacemos dando un paseo a la tabanca de Eticoga para visitar las instalaciones de la sede del parque y ser recibidos por su rey. El recorrido es agradable y camino de la aldea nos encontramos con un numeroso grupo de chavales que machete en mano están limpiando y quemando un campo que resulta ser la pista de aterrizaje para avionetas. Creo que Nuria la primera vez que viajó a estas islas ya tuvo oportunidad de aterrizar aquí y en algún momento nos contará su experiencia.En Eticoga , el director del parque Antonio Da Silva y sus ayudantes, nos explican el proyecto y nos acompañan en nuestra visita por la aldea. Augusto, que así se llama el rey de Orango, está sentado en la puerta de la casa ( que luego resulta que es el lugar en donde están enterrados sus antepasados y entre ellos la princesa Kinka-Pampa) con su sombrero de fieltro negro, nos acompaña y nos va explicando( bueno Antonio va traduciendo) a quién corresponde cada una de las tumbas; el lugar está muy oscuro y encendemos los frontales para poder ver algo y no tropezarnos; en la calle la expectación es grande y la gente nos sigue, también visitamos la cabaña de
las mujeres mayores que van ataviadas con sus faldas de paja y que están un poco enfadadas, pues estaban esperándonos y sin darse cuenta Antonio ha pasado de largo; después cuando ya está anocheciendo y antes de regresar al hotel nos paramos en el edificio que albergará la futura enfermería (otro de los proyectos). El camino de vuelta lo hacemos por la playa para poder observar una bonita puesta de sol. A la llegada nos deleitamos con una cervecita fresca con aperitivo incluido(mancarra y anacardos). Después de una relajante ducha y de una cena copiosa, damos por finalizada esta primera jornada en las Bijagos. Mañana será uno de los días más esperados del viaje, pues tenemos previsto ir a la laguna de Anor para intentar ver a los hipopótamos.
Los habitantes de estas islas practican la agricultura de subsistencia y tan sólo en alguna tabanca se planta mancarra (cacahuetes) para poder vender en el mercado.
G. Bissau es uno de los mayores productores de anacardos. La pesca es otra de sus riquezas y es habitual ver a algunos pescadores de las aldeas a primera hora de la mañana que con una gran habilidad lanzan sus redes para pescar. Además se sigue practicando el trueque como moneda de cambio y esto nos da la idea, que aquí todavía no ha llegado la sed del dinero ni la fiebre del consumo.
El arroz es uno de los alimentos básicos y existen dos tipos de cultivo: en seco denominado “pam-pam” consiste en quemar el bosque y plantar en la superficie despejada, pero este sistema es muy agresivo y se intenta que se abandone, y el otro tipo es la “bolaña” que es la plantación del arroz en mojado y es por lo que apuesta el proyecto. La idea es aún más ambiciosa ya que se intentará extrapolar este modelo al resto de las islas que dispongan de los recursos necesarios en medio ambiente.Desde que me hablaron de este proyecto, me pareció una magnífica idea y me gustaría en un futuro poder volver a las Bijagos, ver que todo el trabajo que está llevando a cabo CBD-habitat sea para mejorar la calidad de vida de sus habitantes y que en un futuro sean ellos los que puedan gestionar sus recursos. La fundación está tratando de firmar un convenio con el gobierno para que no deje construir ningún complejo hotelero de esos mastodónticos, pues ello significaría la muerte de este paraíso.
La mejor manera para ir a las Bijagos es comprar un paquete de todo incluido ya que al no existir infraestructuras hoteleras es muy complicado viajar por libre; además para el transporte entre las diferentes islas se depende de una barca y para llegar desde el continente a las islas no hay transporte diario. Todo ello lo resuelve el hotel que dispone de barcas para llevar a sus clientes desde la pequeña aldea de Biombo.
A parte del Hotel Orango, existe la posibilidad de alojamiento en Joao Vieira en un campamento para pescadores (en esta zona hay abundancia de barracudas, pargos, rayas , tarpones, etc) que regenta un ciudadano francés, o en la pequeña isla de Keré donde disfrutaremos de bellas puestas de sol y nos bañaremos en su pequeña playa de arena blanca, además de servirnos de base para visitar la isla de Carabela.
Otro de los momentos inolvidables del viaje será la visita a Poilao para poder vivir en directo el desove de la tortuga verde que se produce entre los meses de julio y diciembre y dormir en un campamento al lado de la playa.
La temporada de lluvias se desarrolla durante los meses de junio, julio y agosto. En días sucesivos os iré contando mi experiencia personal y las anécdotas y consejos para viajar (dinero,ropa,vacunas, comidas,etc).
Pero quizás alguno de vosotros ya estaréis pensando en un destino exótico, diferente, tranquilo y no muy lejano y por ello yo os aconsejo que rápidamente os pongáis en contacto con nuestra agencia y os daremos toda la información. Nuestra dirección y teléfono es DE VIAJE, C/SERRANO,41 28001 MADRID. 915779899.
Si os resulta más cómodo a través de mi blog, sólo tenéis que ponerme un comentario y responderé a todas las dudas que tengáis.
Ya estoy de vuelta de las Islas Bijagós,y si tuviera que dar un calificativo a este viaje me atrevería a decir que ha sido “fantástico” en su conjunto.Desde el momento en que me propusieron realizar este viaje,las expectativas eran grandes y pienso que se han visto totalmente cubiertas. En el conjunto del viaje, existen una serie de parámetros que hacen que un viaje pueda resultar un triunfo,o que por el contrario sea un auténtico fiasco y en este caso han coincidido todos los elementos y el resultado final ha sido todo un éxito. Los elementos a los que me estoy refiriendo son los compañeros de viaje,los organizadores del mismo y por supuesto,el destino; desde este momento y antes que comience a desglosar mi periplo por estas islas, quiero agradecer en primer lugar a la Fundación CBD-Hábitat y en concreto a la Co-Directora del proyecto de ecoturismo en estas islas Nuria El Khadir su gran profesionalidad y su entusiasmo por llevar adelante esta magnífica propuesta,a Gabriela Pagella directora de News Factory por haber confiado en mi una vez más,a mis compañeros de viaje Alfredo Merino,Jose Luis Angulo,Xavier Moret,Didac Escribano y Clement Racineaux por los buenos momentos que hemos pasado;a Ana,Iris y Luis biólogos de la fundación por su encomiable labor; a todos los componentes del Orango Parque Hotel a cuyo frente están Lauren y Martina; al director del Parque Nacional de Orango Antonio Da Silva y a su grupo de trabajo - Junior,Domingo,Camiño -; al conservador del parque Joao Vieira-Poilao Hamilton Monteiro;al tío Oringa - todo un personaje -,y a Herculano por su pericia al frente del timón.
¿Habéis oido hablar de las Islas Bijagos? ¿donde se encuentran? ¿Cuántas son? Yo os tengo que confesar, que hasta el día que Gabriela de Newsfactory me llamó para organizar un grupo de prensa y poder visitarlas, también desconocía su existencia. Pero acto seguido, entre en la Wikipedia y salí de dudas.
Las Islas Bijagós o archipiélago de las Bijagós son un grupo de 20 islas principales y docenas de pequeñas, situadas en el Océano Atlántico, y que forman parte de la República de Guinea Bissau. En tiempos precoloniales, las islas eran centros de comercio a lo largo de la costa de África occidental, lo que permitió a los nativos a tener una poderosa armada. En 1535, esto les permitió derrotar a los portugueses cuando intentaron conquistar las islas. Estas no fueron tomadas por Portugal hasta 1936.
Las características mas destacables de estas islas aparte de su aislamiento, son su naturaleza, su flora, su fauna - como el caso de la isla de Poliao donde se produce el rito anual del desove de las tortugas verdes marinas gigantes entre octubre y diciembre – y lo más importante es el contacto con los bijagós- de tradición matriarcal - la etnia mayoritaria que habita estas islas cuyas firmes creencias animistas hacen de este lugar uno de los más particulares y especiales de África, lleno de lugares sagrados y ritos de iniciación.
Además de los bijagós, las islas poseen 23 etnias de las cuales las más importantes son: los balante – 30% de la población - , los fula, los manjaco, los papel, los flup y los mandinga.El pueblo bijago, es un pueblo amable y hospitalario, de espíritu abierto y muy acogedor con las personas que les visitan ya que todavía no ha llegado a las islas la fiebre del turismo y por tanto del dinero, pero ellos también quieren vivir mejor gestionando sus propios recursos, y para ello cuentan con la ayuda de de la Fundación española CDB-Habitat que gestiona el Orango Parque Hotel y que a través del mismo intenta y está logrando poner en funcionamiento un modelo ecoturístico, pero manteniendo como objetivo fundamental el respeto por el entorno y sus habitantes. Este hotelito, es un pequeño complejo de 7 cabañas y una casa central – en total para 14 personas – sin ánimo de lucro, y cuyos beneficios se destinan a la elaboración de microproyectos que mejoren las condiciones de vida de sus habitantes.
Estad pendientes de mi blog, ya que después de mi visita, seguiré dando más datos, os hablaré de sus rituales, de la tumba de la princesa Kinka-Pampa, de Nindo – el Dios Supremo - y de muchas más cosas, y lo mas importante los contactos y la manera de contratar el viaje para poder pasar unas vacaciones inolvidables en un entorno único en el mundo.
Un autobús local en Kampala. Y como todo en África, donde comen dos, comen tres, y donde caben veinte caben treinta. Pues eso, treinta pasajeros Y el autobús no se movió hasta que el último asiento, desplegado a mitad del pasillo, estuvo ocupado.
Hace unos años, decidí viajar a Kenia y tuve la gran suerte de conocer a Ángel y a Peter que unos meses antes habían constituido una sociedad hispano – keniata llamada DAMASAFARIS y cuyo objetivo era mostrar al turismo el potencial de este país africano. El sueño de África de Ángel, no duró mucho tiempo, ya que después de poco más de un año de estancia en Kenia murió de manera inesperada.
Siempre rondó por mi cabeza, la posibilidad de dedicar un pequeño homenaje a Ángel, y creo que ha llegado el momento de hacerlo. En otra ocasión, os contaré mi viaje por esos escenarios de los cuales nos habla en cu carta y que yo tuve la oportunidad de vivir en vivo y en directo.
Pocos días antes de su muerte, tuve la oportunidad de recibir un estupendo relato de su última excursión a las “Fuentes del Nilo”, que mañana tendréis oportunidad de disfrutar.
Además, también quiero que veáis la valentía de una persona que disfruta de todas las comodidades de la sociedad occidental y que en un momento de su vida decide romper con todo para irse a África. Esta es la carta que envía después de sus primeros cuatro meses en Nairobi intentando explicar el proyecto perfecto de un mzungu (blanco) loco, y esa excursión a las fuentes del Nilo.
CARTA DESDE AFRICA.- Recibida el 1 octubre 2006
Después de sólo cuatro meses en África, y a un año vista desde que decidí embarcarme en esto e ir a por todas, sólo puedo decir que de momento todo va bien.
La verdad es que es un proyecto arriesgado, tanto en lo personal como en lo profesional, aunque una de las mejores cosas es que ambos aspectos, el profesional y el personal, son sólo uno. Y eso ya por si mismo vale mucho, ya que la mayor parte de las personas, creo yo, que viven en una especie de esquizofrenia indeseada en la mayoría de los casos, teniendo que mostrarse de una forma, que casi nunca sienten, en lo profesional, en el trabajo, y frente a los jefes, y de otra, completamente distinta, durante el resto de su vida. Y lo sé porque me ha pasado a mí también. Sin embargo, para mí, ahora no hay diferencia entre el trabajo y lo que no lo es. Todo es vida, simplemente eso, vida.
Pero el proyecto, ya digo, de vida, y que abarca lo profesional y lo personal, todo en uno, también es bonito, además de arriesgado. Aunque no sí si mucha gente podría entender como se puede considerar bonito el abandonarlo todo, y arriesgarlo casi todo.
Por un lado, la huida de la Mediocridad. No se puede negar que irse a vivir a África, al tercer mundo, e intentar crear una empresa que fundamentalmente venda sueños “El Sueño de África ” en forma de safaris fotográficos en los más bellos y salvajes entornos naturales del mundo, podrá considerarse una locura, o una insensatez o lo que se quiera, pero jamás una mediocridad.
Por otro lado, el Reto. Desde el primer momento he sabido que esto iba a exigirme al máximo. La adaptación a una nueva vida. La soledad. El miedo al futuro y al fracaso. La renuncia a la seguridad y a la comodidad. O se es o no se es. Y punto. Y eso es bonito, o a mí me lo parece. Aunque a veces la parte mas mezquina y ruin del alma intenta jugártela y te hace pensar lo bien que estabas en tu puesto de trabajo asegurado en una multinacional, tu sueldazo, tu cochazo, y tu plan de pensiones. Pero poco a poco, he ido doblegando esa parte tan “sensata” de mi carácter – la madre que la parió – y ya cada vez incordia menos.
Y la aventura. Y la huída de la rutina vital. Porque resignarse a una vida en la que un día es igual a otro y un año igual al siguiente?. Eso era mi vida. Y ya no lo es. Y eso, aunque a veces no es cómodo, lo que si da es intensidad a la vida y los días parece que cunden más. Al no tener asegurado el futuro (que estupidez, pero si nadie lo tiene ) se disfruta más el tiempo y se valoran más las cosas de la vida.
Y la vida salvaje africana. Los grandes paisajes de Masai Mara, Serengueti, Samburu y Amboseli. Y el Kilimanjaro y el monte Kenya, y las Montañas de la Luna. Los lagos Nakuru y Naivasha y Baringo y Bogoria. Meru y Shimba Hilss, Manyara, Tarangire, Ngorongoro y Eyasi y Ruaha y Selous.
Y los grandes gatos: el León, el Leopardo y el Guepardo. Y los pequeños: el serval y el caracal. Y los más modestos depredadores; el chacal, el dorado y el espalda negra, y la Hiena. Y los grandes hervívoros que no temen a nadie; el Elefante, el Rinoceronte y el Hipopótamo. Y las cebras y los ñús, a miles, a millones. Y los antílopes, impalas, elands, kobos, dik diks, topis, búfalos y orix. Todos preciosos. Y las gacelas de Grant y Thomson. Y el cocodrilo. Y los babuinos y los jabalís verrugosos. Y los buitres, los marabús, las águilas, los avestruces, las cigüeñas, los flamencos y los pelícanos. Los estorninos, los calaos, las perdices y las gallinas salvajes de guinea. Las avutardas, los gansos, las garzas y garcetas, las palomas, los cuervos……
El Sueño de África.
Y el pacto por las civilizaciones. O acaso esta empresa no es un ejemplo claro de cooperación entre dos culturas, dos pueblos y dos continentes. España y Kenia. Sin limosnas ni ayudas al desarrollo. Sólo la empresa conjunta de un keniano y un español, en la que cada uno pone lo que tiene y lo que puede. El valor, la ilusión, la profesionalidad, la experiencia, el trabajo, la honestidad. Y también la pasta.
En fin, el proyecto perfecto para un Mzuzu loco