martes, 25 de noviembre de 2008

La Tejera Negra

Es evidente que si hablamos de hayedos en la provincia de Madrid, la joya de la corona es el de Montejo de la Sierra,y si pretendemos concertar una visita,habrá que reservar plaza con mucho tiempo de antelación sobre todo en época otoñal;por ello yo os voy a proponer una visita alternativa a otro hayedo que se encuentra en la otra vertiente de la sierra en el noroeste de la provincia de Guadalajara, en el término de Cantalojas y que no es otro que el hayedo de la Tejera Negra,declarado Parque natural en 1978 y con una extensión de 1641 ha. La importancia de este hayedo, no radica en su extensión,sino en su localización en el centro peninsular,pues los hayedos son característicos de las montañas húmedas situados mas al norte de estas latitudes.

Existen dos rutas para acceder a este hayedo,aunque lo más aconsejable,es hacer una ruta circular que sería la siguiente;podemos salir de Madrid por la N-I hasta el cruce de la N-110 a Riaza y desde aquí a Ayllón.En este bonito pueblo podemos hacer una parada y recorrerlo tranquilamente disfrutando de su plaza y sus iglesias; también hay visitas teatralizadas por el casco antiguo.Seguimos la ruta enlazando con la SG-145 y atravesamos los pueblos de Francos, Estebanvela, Santibáñez de Ayllón y Grado del Pico; poco después veremos una central eólica y nada mas pasarla encontraremos un cruce que nos lleva hacia Cantalojas punto de entrada a este hayedo; ya desde el pueblo hay indicadores que nos conducen hasta en centro de interpretación en donde nos apuntarán la matricula del coche que nos permitirá acceder al parking de donde parte la marcha. Ah, una advertencia es aconsejable llamar previamente y reservar plaza para el aparcamiento que está limitado a 150 vehículos, si no es así es preferible ir a partir de las 13 horas. La ruta habitual denominada Senda de Carretas se hace en 2-3 horas y es un itinerario circular. Comienza en la fuente del parking y va paralela al río Lillas siguiendo las balizas de color blanco; cruzamos el puente sobre un arroyo y giramos a mano izda y comenzamos un leve ascenso entre robles, pero donde ya se empiezan a ver las primeras hayas; al rato nos daremos de frente con la Carbonera; seguimos el camino y volvemos a cruzar el arroyo y desde este instante comienza una dura ascensión bajo las copas de las hayas con algún tejo aislado, hasta llegar hasta llegar a la pradera de Mata Redonda desde donde se divisa una bella panorámica de los alrededores. En este punto podemos aprovechar para reponer fuerzas. Desde este punto y siguiendo la ruta circular entre robles, hayas y pinos comenzamos la bajada hasta el punto de partida.
La importancia de este hayedo, no radica en su extensión, sino en su localización en el centro peninsular, pues los hayedos son característicos de las montañas húmedas situados mas al norte de estas latitudes.
Existe otra alternativa de marcha para los mas deportistas, se trata de “La senda del robledal” de 17 kilómetros, de 6 a 7 horas, 300 metros de desnivel y de una dificultad media-alta; en esta marcha en realidad se trata de hacer la aproximación al parking andando. También, y para los que no les guste caminar, hay otra alternativa y es llevarse la bicicleta y hacer la ruta circular de 21 kilómetros que parte del Centro de Interpretación.
Por cierto, es importante llevar calzado y vestimenta adecuada para caminar; dejad la chupa de cuero y los zapatos de tacones en casa (no es la primera vez que me encuentro a este tipo de aventureros de fin de semana, jugándose el tipo por trochas demasiado peligrosas). Hay una fuente de agua en el aparcamiento.

La vuelta a Madrid podemos hacerla deshaciendo el camino hasta el cruce, para desde aquí ir a Galve de Sorbe y por la CM-1006 hasta Cogollado (parada para ver la plaza y el palacio del Infantado), Humanes, Guadalajara y ya por la N-II hasta Madrid.

Aunque el otoño es la mejor época para la visita, es un lugar que merece la pena durante todo el año, pues la espectacularidad de sus paisajes, sus ríos, sus montañas, su fauna, su flora y sus pequeños pueblos de arquitectura negra, harán de este recorrido un día inolvidable.

2 comentarios:

Carlos Múgica dijo...

No me lo puedo creer Santos...me meto en tu blog para echarle un vistazo y me encuentro con este post!...acabo de volver de alli y he regresado enamorado...aunque no hemos podido ver el hayedo por el clima (malditas placas de hielo!)...hemos estado en sitios reconditos que rodean al hayedo y que parecen sacados de un cuento (sobre todo la ciudad "deshabitada" que no abandonada de La Vereda)...te paso un link a la página de una empresa muy familiar que se dedica a hacer actividades por alli y que nos han tratado estupendamente!!(http://www.alternatura.es)

Un saludo!

Nos vemos el 11 de Diciembre Santos!

PD: Menos mal que ya no estoy en la agenciaporque con este Madrid de capa caída...jejeje

Magda dijo...

Santos, acabo de descubrir tu blog y me ha resultado muy interesante. En cuanto a La Tejera (¡¡¡qué maravilla en otoño!!!), no sólo es aconsejable reservar sino que en los meses de otoño-invierno es obligatorio.

Un saludo
Magda